El poblado de El Fito o Hito se extendía a la izquierda de la carretera, que desde Toro se dirige a Pozoantiguo,entre los puntos kilométricos cuatro y cinco. Su iglesia, san Pedro Príncipe de los Apóstoles, estaba situada a la altura del kilómetro cuatro en un montículo denominado, aún hoy, el teso san Pedro.
Según
don Santiago Samaniego Hidalgo, en su obra “El retablo zamorano a finales del
siglo XVI: Montejo y Falcote”, afirma: “El 11 de enero [1591] está fechada la
escritura de evaluación entre la viuda del entallador Pedro de Encieta y Juan
de Montejo sobre el valor del Calvario y el relieve de la Anunciación de la
Virgen con seis ángeles que tallara para
el retablo de San Pedro, en el despoblado del Fito, actualmente desaparecido”.
(pág.336). Se tasó en 126 ducados, un alto importe para aquellos tiempos.
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| Pozo del antiguo poblado de El Fito |
En los inicios del segundo tercio del siglo
XVII la decadencia de su iglesia
parroquial de “San Pedro Príncipe de los Apóstoles” y su anexo de las “Adalias”,
denominada de “San Sebastián y Santa María”,
es evidente.
En la Visita del trece de agosto de 1651 realiza por el señor doctor Pedro Domínguez Moreno, vicario
visitador y juez ordinario en Toro y su vicaría por don Juan Coello de Sandoval
y Rivera obispo de Zamora, informó que hacía más de año y medio que el último vecino que había “se desavecindó”
estando despoblado y arruinados sus edificios; era su párroco el licenciado Alonso Cabrera “Dessilva”.Por
dicha causa “manda que la cajita de plata (donde se guardaba el Santísimo
Sacramento de la Eucaristía), las tres olieras de plata y demás bienes y
ornamentos los tenga en su poder y depósito Andrés Pérez, mayordomo presente de
dicha iglesia y vecino del lugar de Tagarabuena, y los demás que lo fueren de
ella”.
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| Colegiata de Toro de quién dependerá las iglesias rurales de las Adalias y el Fito. |
“Por
cuanto el candelero de madera que está en dicha iglesia servía en ella para
poner el Cirio Pascual, quedándolo en ella está en peligro de que quiebren,
mandó Su Merced trasladarlo a la iglesia colegial de , de la ciudad de Toro
donde esté en depósito y otorgue su mayordomo, siendo primero fijado por un escultor
tasación”. El entallador Juan Flores…”fue a la iglesia colegial en la cual vio
un candelero grande labrado donde se pone el cirio Pascual que dicen era de la
iglesia del lugar del Fito y habiéndole visto dijo y declaró….que si se hubiera
de hacer, no se hiciera ahora [1651] por dos mil reales y que en el tiempo que
lo hicieran, conforme están las cosas,
valdría hasta ochocientos reales poco más o menos”. El dos de abril de 1797, el señor obispo de
Zamora, manda demoler las iglesias de los despoblados del Fito y del “Tiorrodrigo”
por hallarse en mal estado, pasando todos sus bienes a la iglesia colegial de Santa María de Toro,
de quien pasa a depender hasta 1807.
Autor: Jesús Castro Domínguez.
http://pozoantiguoysusgentes.blogspot.com
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